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lunes, 5 de marzo de 2012

Un dia cualquiera


Son las cinco de la mañana algo me a desvelado y ya no puedo seguir durmiendo. Voy a la cocina a fumarme un cigarro y beber algo mientras en las noticias el mundo sigue igual, decido ir a mojar señuelos mientras la mi mujer y el niño duermen. Preparado el equipo decido a que sitio ir, quince minutos de coche y llegada al pesquero. Ni las ratas querían salir con el frió que hace, ni rastro de gente a lo que alcanza la vista. Decido ponerme en la punta del espigón, zona algo angosta y casi siempre con rocas cuya terso firme es sinónimo de encontronazo con el suelo. Enciendo un cigarro oteando el titánico y mágico océano que tanto a dado que hablar a lo largo de la historia, ni rastro de movimiento en superficie por lo que decido intentar embaucar a algún calamar. Se hacen mas de las seis, los calamares no aparecen.
Cambio de aparejo, selecciono algún flotante de la caja, tobimaru, rapala, superspook, hart.... superspook este vendrá bien.
Un lance, dos lances, tres lances...veinte lances, nada solo yo, mi cigarro y el preámbulo antes del amanecer. Son las siete y media, el sol ya quiere venir, aburrido de cambiar señuelos y cansado de trabajarlos, las muñecas ya empiezan a acusar el esfuerzo, decido descansar y fumar.
Mientras acabo de aspirar las ultimas bocanadas de humo pienso en poner uno de esos señuelos del decathlon imitacion de sammy que tengo por la caja fruto de la compra impulsiva del principiante. Monto la caña con el paseante y sin esperanzas ni ganas intento pasar el rato hasta el amanecer.
Yo, la roca fría y húmeda debajo de mis pies, el cigarro calentando mis dedos y el paseante haciendo lo que puede en el mar.
De súbito algo rompe la armonía del silencio del pesquero, un sonido como el de un bloque de cemento precipitándose al agua, algo a emergido donde antes estaba el frió paseante, plateado, azul, resplandeció fuera el segundo que lo pude ver ya que estaba a unos quince metros de mi, era la gran pieza que siempre había soñado pescar y la tenia con el señuelo menos apreciado de la caja de aparejos.
Aquella bestia sacaba hilo del pequeño carrete, cerré un poco la salida para cansar lo un poco pero no parecía importarle, el sonido del carrete no remitía. Esto no es una lubina pensé, pude frenar el carrete antes de que en sus carreras cruzara las piedras del espigón. Parecía que se había cansado de nadar, intente bombear lo hacia arriba, nada ni diez centímetros, e enrocado pensé mala suerte, pero aquello que estaba al final del sedal siguio sacando hilo hacia alta mar como si poseidon lo reclamara. Seis minutos después de la picada el animal pensó que mejor dejar ese bocado, el paseante volvió a subir mientras recogía la linea, potera bien, anillas bien, todo bien solo un mordisco en el artificial y yo blasfemando tan fuerte que las puertas del infierno se hicieron eco de ello.
En fin después de eso decido sentarme comer algo y esperar al alba mientraspensaba en lo sucedido para ver mis errores.
Son las ocho y media amanece y yo sentado en las rocas, aparecen los primeros pescadores de boya casuales, un amigo ¿que a salido algo?.......
Este es el señuelo

La pesca de la sepia

Quizás esta sea dentro del lance ligero la pesca mas productiva de todas, ya que en los meses de septiembre y marzo raro es ir a pescar estos cefalopodos y no coger ninguno.
El equipo nesecesario para esta pesca es quizás el mas simple de todos.
Yo suelo utilizar un carrete 5:1 de ratio, de un tamaño 2500 con hilo 0.25 triline de la casa berkley, cañas suelo llevar varias pero me muevo entre 1,80 y 2,70 de acción media, es importante llevar un equipo ligero para poder notar el mas mínimo tirón si no perderemos la mayoría de piezas.
Casi obligatoria mente salabre con un mango largo 2 metros como mínimo, muchas veces la sepia no viene bien clavada en las coronas de nuestro pajarito y seria imposible subirla sin ayuda de un salabre.
Y al final del hilo un pajarito, la elección del señuelo siempre es motivo de discusión ya que a cada pescador le gusta mas un modelo o un color diferente, no entrare en este tema hoy solo decir que suelo pescar con colores rosas y naranjas con grandes resultados....
Tenemos que tener especial cuidado con el tamaño de pajarito que usemos no vale el mismo para todos los sitios, dependiendo del tipo de fondo, el viento, el estado de la mar y luminosidad elegiremos color y tamaño.
E pescado sepias a todas horas pero casi siempre se me han dado mejor el desde el atardecer hasta pasadas dos horas de la puesta de sol.
La pesca es muy sencilla, se lanza el pajarito y se deja profundizar, una vez que esta en el fondo se recoje muy despacio, notando como arrastra por el fondo, algunos pescadores prefieren que no llevarlo por el fondo ya que se pierden muchos, nunca debemos de dejar de recojer, una tecnica que me funciona muy bien es tener la caña en un angulo de 70º con respecto al mar y cuando siento alguna presion levanto poco a poco la puntera de la caña. En este momento puede ser que tengamos enganchado una roca o alguna alga, se reconoce enseguida porque por mucho que levantemos la caña no cede un centimetro en tal caso con un par de sacudidas hacia arriba suele soltarse,si no sale dejaremos un poco de hilo para que la corriente pueda moverlo hasta desenrocarlo, a las malas nos tocara movernos para poder liberarlo y si aun asi no sale no quedara otro remedio que tirar hasta romper perdiendo el pajarito.
La picada de la sepia es muy singular, notaremos como cuando traemos una bolsa llena de agua que no ofrece resistencia, en ese momento dudaremos si hemos enrocado pero no debemos de dejar de recojer ya que las coronas no tienen muerte y los tentaculos se soltarian.
Si es una sepia tirara del pajarito en direccion contraria a la nuestra a veces con fuertes tirones consecutivos o dejandose llevar dando algun tiron fuerte ocasionalmete, pero nunca debemos aflojar el carrete, personalmente me gusta pescarlas con el freno cerrado casi por completo jugando con la flexibilidad de la caña para contrarrestar los fuertes tirones que pueden llegar a dar sin romper sus fragiles tentaculos.
Una vez tengamos la sepia cerca de la orilla lo siguiente es subirla, si esta bien enganchada podemos levantarla hasta cogerla con la mano, aunque prefiero sacarla con salabre ya que muchas se an escapado al intentar levantarlas a peso. Debemos intentar cogerla con el salabre enseguida porque la mayoria de veces que lo ve acercarse es cuando empieza a dar fuertes sacudidad para liberarse y suele conseguirlo ya que sus tentaculos no son tan duros como los de un pulpo o un calamar, asi que un buen amigo a nuestro lado que sepa manejar bien el salabre es pesca garantizada.
Es un tipo de pesca muy lento lo que no quiere decir que sea aburrida ya que si sabemos donde y cuando pescarla nos divertiremos mucho.
Cigarrito de la victoria
Otra cosa que comentaros es que cuando se os escape alguna insistir, suelen engancharse muchas veces al pajaritos son realmente voraces y territoriales.
Hasta cinco veces e llegado a enganchar la misma sepia en el pajarito, un truco que me enseño un amigo es que si se te suelta del pajarito dejalo no lo muevas ella misma se vuelve a enganchar.